Si has echado de menos volar con todo esto de la pandemia y que las cosas todavía no van como iban antes siempre puedes recurrir al simulador de vuelo alternativo que ha diseñado y montado Alex Shakespeare. Lo de alternativo es importante porque en lugar de sentarte a los mandos de un avión con él simulador de Alex podrás sentirte como si estuvieras aterrizando en varios aeropuertos del mundo en la cabina de pasaje. Sin turbulencias de ningún tipo, eso sí.

Está montado con tres asientos premium de un avión colocados en lo que podría perfectamente ser la pared trasera de la sección de la cabina en la que estaban montados mientras volaban, aunque Alex no explica si la fabricó él o si la compró en algún desguace. Al otro lado de la ventanilla hay un monitor de PC. El «destino» se escoge mediante una botonera que originalmente proviene de la cabina de un avión colocada en el exterior. Todo está controlado por una Raspberry Pi Zero en la que hay cargados varios vídeos de otros tantos aterrizajes.

Para darle más realismo al asunto el simulador incluye también un panel de botones para las luces y ventiladores individuales, así como para llamar a la tripulación de cabina… aunque en este caso suena un mensaje en todos los altavoces de Google de la casa de Alex. Lo controla un ESP32.

(Gizmodo vía Irreductible. Que, diga lo que diga él, yo no montaría uno de estos en casa. Creo).

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